Perfil del cóndor de California

Los carroñeros tienen mala fama. Se les considera animales estúpidos y sucios que ocupan un escalón inferior en la sociedad animal que los cazadores más reputados y los gráciles herbívoros.

Cóndores de California contradicen y refuerzan este estereotipo en muchos aspectos, ya que son enormes y elegantes, pero también se cubren habitualmente de pis y son propensos a vomitar de miedo.

Lamentablemente, se extinguieron en estado salvaje en 1987, pero desde entonces han sido objeto de intensos programas de cría en cautividad y reintroducidos en California y Arizona. Se calcula que actualmente viven en estado salvaje más de 500 ejemplares, lo que los convierte en una de las especies de aves más raras del mundo.

Datos sobre el cóndor de California

Hábitat: Matorral rocoso, bosque de coníferas y sabana de robles
Ubicación: México, EE.UU.
Vida útil: Hasta 70 años
Tamaño: Envergadura de unos 3 metros (9 pies)
Peso: Hasta 11 kg (24 lb)
Color: Negro con bandas blancas bajo las alas
Dieta: Cadáveres de mamíferos
Depredadores: Humanos, águilas reales, osos
Velocidad máxima: 65 km/h (40 mph)
Nº de especies:

1
Estado de conservación:

En peligro crítico

El cóndor de California es un buitre del Nuevo Mundo y el ave terrestre más grande de Norteamérica. Viven en matorrales rocosos y bosques cerca de acantilados o grandes árboles para anidar.

Cóndor es un nombre común para dos especies, incluido el pariente cercano del cóndor de California, el cóndor andino (Vultur gryphus), que habita en las montañas andinas de Sudamérica.

Los cóndores de California son animales sencillos. No son buenos en muchas cosas, pero saben en lo que son buenos. Su enorme envergadura los transporta cientos de kilómetros en viajes de búsqueda de alimento a gran altitud, seleccionando con aguda vista los cadáveres de mamíferos para llevárselos a sus feas crías.

A pesar de ser un poco basura, se trata de aves impresionantes, con una triste historia de persecución directa, y una difícil situación por las balas de segunda mano que sigue amenazando a la especie con la extinción.

Datos interesantes sobre el cóndor de California

1. Es el ave más grande de Norteamérica.

El cóndor de California tiene 3 m de envergadura y pesa hasta 12 kg, lo que lo convierte en el ave más grande de Norteamérica.

La hembra del cóndor de California es más pequeña que el macho, lo que no es habitual entre las aves de presa.

El peso medio y la envergadura de este cóndor superan a casi todos los demás animales voladores, lo que lo convierte, en general, en la criatura voladora más grande que existe, de media .

Aunque no alcanzan el primer puesto en envergadura del mundo, consulte nuestro artículo sobre las aves voladoras más grandes del mundo.

2. Nacido en las alturas

Los cóndores de California pasan gran parte de su vida a gran altitud. Suelen anidar entre los 460 y los 1.300 metros sobre el nivel del mar, pero también se encuentran a más de 2.000 metros, normalmente en agujeros naturales de acantilados o árboles excepcionalmente altos.

Estas enormes aves muestran una enorme variedad de lugares y diseños para anidar. Es frecuente encontrar nidos de tan sólo 43 cm de diámetro junto a otros tan espaciosos como de ¡3,7 metros! Construyen un suelo de grava o limo para el espacio de anidación, sobre el que depositan y protegen los huevos.

3. No son muy buenos construyendo sus nidos

Aparte del suelo de grava, no parecen dedicar mucho trabajo a la construcción del nido. Tampoco son muy exigentes con las condiciones. Los nidos pueden ser profundos, poco profundos, ocultos o expuestos, y los huevos suelen estar tanto en la oscuridad total como a la luz directa del sol.

Los depredadores terrestres acceden fácilmente a muchos nidos, lo que explica la elevada tasa de fracaso en la reproducción del cóndor.

Lo curioso es que estas malas prácticas de nidificación no parecen deberse a la falta de buenos inmuebles. La elección del lugar de cría de estas aves sigue siendo objeto de estudio, ya que está muy relacionada con su éxito como especie.

Los padres cambiarán de lugar de nidificación cada temporada de cría, tanto si ésta ha sido un éxito como un fracaso.

4. Crecen lentamente

A pesar de nacer con los ojos abiertos, un polluelo de cóndor puede tardar una semana en arrastrarse fuera del huevo. Cuando salen del cascarón, son unas feas bolitas de pelusa con la cara y el cuello calvos.

Ambos progenitores custodiarán al polluelo y, puesto que sólo hay uno, parecen prestarle mucha atención. Se trata de una estrategia de cría que consume muchos recursos; los padres alternarán viajes de búsqueda de alimento de más de 250 km (160 millas) para encontrar comida para el crecimiento del polluelo.

El polluelo permanecerá en el nido entre cinco y seis meses, y seguirá dependiendo de sus padres hasta un año. A los seis años, los cóndores están listos para empezar a criar.

5. Tienen garras romas

Hay algunas cosas más que hacen de este animal una bestia extrañamente simple. No sólo son un poco basura en la cría, sino que también tienen características físicas muy limitadas.

Como pasan mucho tiempo posadas o caminando sobre grava y rocas, sus garras son romas. Su uña trasera sólo está ligeramente curvada y no sirve para agarrarse.

Mientras que para un águila esto supondría una desventaja, estos cóndores prefieren carroñear la carne de los cadáveres a capturarla ellos mismos, por lo que se las arreglan con unas garras de las que se burlarían la mayoría de las rapaces.

6. Apenas saben hablar

Ni siquiera son buenas comunicándose. La mayoría de las aves tienen una siringe, que es el equivalente en aves de una laringe. Esto es lo que permite la diversa e intrincada comunicación vocal que vemos en otras comunidades de aves.

Los cóndores no tienen nada de eso, sino que saltan de un lado a otro gruñendo y silbándose unos a otros. Pero este estilo de comunicación primitivo es suficiente para mantener una estructura social jerárquica.

Son pájaros básicos con necesidades básicas, y esto les ha servido bien. Aunque no son buenos en muchas cosas, hay algunas que los distinguen de otros pájaros.

Pareja de cóndores de California rescatados posados en la rama de un árbol.

7. Se orinan encima cuando tienen demasiado calor

Esta es una afirmación audaz pero eficaz en cualquier comunidad, pero en las aves suele ser imposible.

En la mayoría de las especies, las aves no son capaces de orinar, sino que es habitual que todos los productos de desecho salgan por el mismo conducto.

La típica caca de pájaro contiene residuos ureicos y fecales, todos deliciosamente mezclados en el momento en que sale de la cloaca, pero no en los cóndores de California, que pueden separar sus excreciones.

Cuando tienen calor, los cóndores de California excretan un refrescante chorro de orina sobre sus patas. El agua de este cóctel se evapora, alejando el calor del ave, al igual que hace el sudor en animales más civilizados.

También deja residuos sólidos, que en el cóndor es una sustancia pulverulenta ancha llamada ácido úrico, que les da un bonito brillo blanco en las patas.

8. Miedo a vomitar

Pero ahí no acaba la cosa. Si no te han desanimado lo suficiente las patas crujientes de pis, tienen otro truco bajo la manga.

Cuando están agitados y asustados, los cóndores de California vomitan jugo de cadáver rancio y carne parcialmente digerida.

Se suele pensar que es un mecanismo de defensa, pero el Servicio de Parques Nacionales de la zona afirma que es sólo un signo de nerviosismo y que no se trata principalmente de una estrategia defensiva.

Sin embargo, el vómito tiene dos propósitos potenciales obvios: en primer lugar, hace que el ave sea más ligera, por lo que podría ser capaz de escapar rápidamente. En segundo lugar, es repugnante.

Bastantes especies de aves utilizan el vómito como arma, así que no es descabellado pensar que el cóndor pueda al menos beneficiarse de esa reputación, aunque no lo haga a propósito.

9. Su cabeza calva les ayuda a alimentarse

Se trata de una adaptación que les ayuda a mantenerse más limpias cuando meten la cabeza en la carroña y evita que la sangre se apelmace y obstruya las plumas.

10. El cóndor es la especie de ave más longeva

Muchas aves son conocidas por su longevidad, y algunas especies superan regularmente los 30 o 40 años. Sin embargo, los cóndores pueden ser las aves más longevas del mundo.

Un macho llamado Thaao, nacido en cautividad en 1930, vivió la impresionante cifra de 79 años, la mayor longevidad registrada en un ave.

11. Están en peligro por el plomo

Aunque los esfuerzos de conservación han dado lugar a protecciones contra la caza de estas aves, siguen sufriendo indirectamente las balas.

Los ácidos estomacales de los cóndores son extremadamente potentes, lo que les permite digerir huesos pequeños y garantizar la aniquilación de cualquier bacteria nociva presente en su alimento antes de que pueda causar ningún daño.

Sin embargo, esto hace que los cóndores sean especialmente propensos al envenenamiento por plomo porque, a diferencia de otros carroñeros, su sistema digestivo sí puede descomponer las balas que suelen quedar en los cadáveres abatidos por los cazadores.

Los cóndores se envenenan con los perdigones de plomo de la carne que rebuscan en la basura, una forma lenta y desagradable de morir. Este problema es tan frecuente que las poblaciones protegidas se someten a controles rutinarios para detectar la presencia de plomo y se les administran medicamentos para ayudar a reducir la acumulación en sus sistemas.

Aunque las poblaciones salvajes del cóndor de California siguen siendo excepcionalmente escasas y están en peligro crítico de extinción, su número está aumentando y las crías en cautividad van bien.

Si se aborda el problema de la intoxicación por plomo, su reintroducción es sólo cuestión de tiempo y educación.

12. Los esfuerzos de conservación dan esperanzas a los cóndores de California

En un momento dado, el cóndor de California estaba completamente extinguido en estado salvaje, cuando su situación era especialmente grave en 1987. Los 22 ejemplares salvajes que quedaban fueron capturados e incluidos en un programa de cría dirigido por el San Diego Wild Animal Park y el zoo de Los Ángeles.

El proyecto de conservación del cóndor de California es uno de los más caros de la historia de Estados Unidos, con un coste total de más de 35 millones de dólares y un coste anual de 2 millones de dólares al año.

En la actualidad hay más de 500 cóndores de California adultos en libertad, y los intensos esfuerzos de conservación garantizan que su número aumente constantemente.

Resumen del expediente del cóndor de California

Clasificación científica

Reino: Animalia
Filo: Cordados
Clase: Aves
Orden: Accipitriformes
Familia: Cathartidae
Género: Gymnogyps
Nombre de la especie:

Gymnogyps Californianus

Fuentes objetivas y referencias

  1. Snyder, N. F. R., Ramey, R. R., & Sibley, F. C. (1986), "Nest-Site Biology of the California Condor", The Condor.
  2. "Cóndor de California (Gymnogyps californianus) Fact Sheet: Reproduction & Development", Zoológico de San Diego.
  3. James Orton (1871), "On the condors and humming-birds of the Equatorial Andes", Annals and Magazine of Natural History.
  4. Radhika Roach & Malisha Vinod Patel (2019), "CONDOR DE CALIFORNIA: una síntesis bibliográfica de las principales amenazas y los esfuerzos de recuperación de la población", Research Gate.
  5. Wood, Gerald L (2012), "The Guinness book of animal facts and feats", Internet Archive.
  6. Alyssa Kapnik (2019), "El programa para salvar de la extinción al cóndor de California avanza", KALW.
  7. BirdLife International (2020), "Gymnogyps californianus", Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN 2020.